Sobrescribir enlaces de ayuda a la navegación
Niños en conflictos, refugiados, mujereres en Afganistán... Las noticias del jueves
El número de niños muertos o que resultaron mutilados en conflictos armados llegó el año pasado a 11.649, la cifra más alta nunca registrada. Los conflictos también han disparado el número de desplazados forzosos hasta los 120 millones de personas.Hoy se cumplen mil días desde que se anunció la prohibición de que las niñas de Afganistán asistieran a la escuela secundaria.
La violencia contra los niños alcanzó en 2023 “niveles extremos”, con un número “sin precedentes” de muertos en Gaza
El número de niños muertos o que resultaron mutilados en conflictos armados llegó el año pasado a 11.649, la cifra más alta nunca registrada y que supuso un 35 % de aumento con respecto a 2022. El mayor número se verificó en los Territorios Palestinos Ocupados, seguido de la República Democrática del Congo, Myanmar, Somalia, Nigeria y Sudán.
“Israel y el Territorio Palestino Ocupado presentan una escala y una intensidad sin precedentes de violaciones graves contra los niños”, señala un informe de Naciones Unidas. En total, la ONU verificó “8009 violaciones graves contra 4360 niños” en Israel, Gaza y Cisjordania, más del doble de las cifras del Congo , el siguiente peor lugar en cuanto a violencia contra los niños. En total, 5698 violaciones se atribuyeron a las fuerzas armadas y de seguridad israelíes, y 116 al brazo armado de Hamás. Los colonos israelíes fueron juzgados responsables en 51 casos.
La evaluación incluye por primera vez a Israel en un anexo de Estados responsables de violaciones de los derechos de los niños, señalando que sus fuerzas armadas y de seguridad matan y mutilan niños y lleva a cabo ataques contra escuelas y hospitales.
En todo el mundo, la ONU verificó el asesinato de 5301 niños en 2023. De ellos 2267 eran palestinos y 113 israelíes.
En la Franja de Gaza, murieron 2141 y en Cisjordania y Jerusalén Oriental, 126. El proceso de atribución de responsabilidades está en curso, pero el informe señala que “la mayoría de los incidentes fueron causados por el uso de armas explosivas en zonas pobladas por parte de las fuerzas armadas y de seguridad israelíes”.
Las Naciones Unidas verificaron que 43 niños israelíes murieron en los actos terroristas perpetrados el 7 de octubre por Hamás. Un total de 47 niños israelíes ese día y 36 de ellos fueron retenidos como rehenes y sometidos a malos tratos en la Franja de Gaza. A diciembre de 2023, dos niños seguían retenidos.
El informe admite que sólo reflejaba una imagen parcial de la situación en Gaza. Se reportaron más de 23.000 violaciones contra niños: casi 20.000 palestinos y 3900 israelíes que están pendientes de verificación.
Récord de desplazados forzosos
El número de desplazados forzosos en el mundo ha alcanzado los 120 millones de personas a mayo de 2024. Los conflictos en están provocando nuevos desplazamientos y requieren una solución urgente, dijo ACNUR en su último informe.
Los conflictos en Gaza, Sudán, Myanmar y la República Democrática del Congo han sido factores determinantes para el aumento
“Lamentablemente es el 12 año consecutivo en el que esta cifra aumenta”, dijo el Alto Comisionado Filippo Grandi.
El número de refugiados y otras personas que necesitan protección internacional
ascendió a 43,4 millones, incluyendo a los seis millones de refugiados palestinos bajo mandato de UNRWA.
El 73% de los refugiados en todo el mundo vienen de cinco países: Afganistán (algo más de 6,4 millones), Siria (6,4 millones) Venezuela (6,1 millones), Ucrania (6 millones) y Sudán (1,5 millones).
En conjunto, el total de refugiados venezolanos pasó de 5,4 millones a finales de 2022 a 6,1 millones a finales de 2023. EL 97 de ellos se encuentran en otros países latinoamericanos: Colombia (2,9 millones), Perú (1 millón), Ecuador (471.400) y Chile (435.800).
El 75% de todos los 43 millones de refugiados que hay en el mundo residen en países de renta baja o media. Los países que más refugiados acogen son Irán (3,8 millones),
Türkiye (3,3 millones), Colombia (2,9 millones), Alemania
(2,6 millones) y Pakistán (2 millones).
Mil días sin escuela para las niñas de Afganistán
Hoy se cumplen mil días desde que se anunció la prohibición de que las niñas de Afganistán asistieran a la escuela secundaria. UNICEF insto a las autoridades de facto a que permitan a todos los niños reanudar el aprendizaje.
"Mil días sin escolarizar equivalen a 3000 millones de horas de aprendizaje perdidas”, dice la agencia.
Para 1,5 millones de niñas, esta exclusión sistemática no es sólo una flagrante violación de su derecho a la educación, sino que también se traduce en una disminución de sus oportunidades y en el deterioro de su salud mental. Además, les protege a las niñas del matrimonio precoz, la desnutrición y otros problemas de salud.
Por otro lado, la Oficina de Derechos Humanos ha pedido a los Talibanes que reviertan la “última medida adoptada para restar poder a las mujeres en Afganistán”. Las autoridades de facto han comunicado a las funcionarias a las que se ha prohibido ir a trabajar que a partir de ahora sus salarios se reducirán al nivel más bajo, independientemente de su experiencia o cualificaciones.
“Esta última decisión discriminatoria y profundamente arbitraria agrava aún más la erosión de los derechos humanos en Afganistán”, dijo la Oficina.
Los países africanos siguen sin destinar suficiente dinero a la educación
La mayoría de los países africanos no están cumpliendo sus compromisos de asignar el 20% de su presupuesto nacional a la educación, como recomiendan los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Según UNICEF, nueve de 49 países africanos -menos de uno de cada vinvo- dedican el 20% o más de su gasto público a la educación, mientras que 24 se comprometen a destinar al menos el 15%, y seis países destinan menos del 10%.
A pesar de los considerables progresos realizados por los gobiernos africanos en el aumento de la matriculación en primaria y primer ciclo de secundaria durante la última década, las escuelas carecen de fondos suficientes, las aulas están masificadas y no hay suficientes profesores, muchos de ellos sin la formación y las competencias adecuadas.
Los bajos resultados de aprendizaje siguen siendo motivo de gran preocupación, ya que cuatro de cada cinco niños africanos de 10 años son incapaces de leer y comprender una simple historia.