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No quedan palabras que puedan hacer justicia al pueblo de Gaza

El responsable del organismo de socorro a los palestinos afirma que la guerra ha tornado a los gazatíes en seres con vidas y futuros rotos. La ONU solicita 2800 millones de dólares para llevar ayuda humanitaria a ese pueblo en tanto unas 360.000 personas huyen de Rafah tras la amenaza israelí de un ataque terrestre a esa ciudad que ha servido de refugio a 1,4 millones de personas.

La amenaza de Israel de una inminente embestida militar terrestre a Rafah ha empujado a cerca de 360.000 personas a huir en la última semana en medio de continuos bombardeos israelíes que tienen paralizadas las entregas de ayuda humanitaria, informó este lunes la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA).

El éxodo comenzó cuando Israel emitió una orden de evacuación de esa ciudad del sur de Gaza en la que se refugiaban 1,4 millones de personas, muchas de las cuales habían migrado del norte de ese territorio asediado en busca de seguridad.

Las familias que huyen de Rafah se dirigen al norte de Gaza, donde los bombardeos y otras órdenes de evacuación han creado más desplazamientos y miedo entre la población, además de que habrían asesinado a otro trabajador humanitario de la ONU, elevando a 188 el número de sus empleados muertos desde el 7 de octubre.

El trabajador abatido, un oficial de proyectos, tenía 53 años y se encontraba en la ciudad de Deir Al Balah, en el centro de la Franja, luego de haber salido de Rafah. El hombre era casado y tenía cuatro hijos, indicó la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos.

El organismo también reportó que el campo de refugiados de Jabalia, en el norte de Gaza, fue uno de los objetivos bombardeados.

Vidas y futuros rotos

El comisionado general de la UNRWA reiteró que no hay en Gaza ningún lugar adónde ir. “No hay seguridad sin un alto el fuego”, subrayó.

“Ya está todo dicho. No quedan palabras que puedan hacer justicia al pueblo de Gaza. Son personas, como tú y como yo. Solían tener sueños, eran parte de una comunidad vibrante y diversa (…) Ahora, sólo son vidas rotas y futuros rotos”, lamentó en una publicación en X.

La UNRWA recordó con vehemencia que el acceso humanitario a Gaza “es una cuestión de vida o muerte” para los gazatíes, que sufren bombardeos implacables e inseguridad alimentaria. 

“Necesitamos con urgencia un paso seguro e inmediato para la ayuda y los trabajadores humanitarios”, recalcó la Agencia.

Hace una semana, Israel avanzó con su ofensiva militar contra Rafah, tomando el control de su cruce fronterizo con Egipto desde el lado de Gaza. Asimismo, cerró el cruce de Kerem Shalom.

Cientos de miles de personas huyen de Rafah ante un inminente ataque israelí a esa ciudad.
© UNRWA
Cientos de miles de personas huyen de Rafah ante un inminente ataque israelí a esa ciudad.

Solicitud de fondos urgentes

Para tratar de aliviar las necesidades más imperiosas de más de tres millones de palestinos tanto en Gaza como en Cisjordania durante los próximos ocho meses, la ONU llamó a la comunidad de donantes a reunir 2800 millones de dólares.

La subsecretaria general de la ONU para Asuntos Humanitarios, Joyce Msuya, dijo que durante meses, mujeres y niños han sido asesinados a un ritmo que supera cualquier guerra en este siglo. 

Las cifras del Ministerio de Salud de Gaza reportan que tras más de siete meses de guerra han muerto al menos 35.000 personas y unas 70.000 han sido heridas o se encuentran desaparecidas, además de que hay muchas más atrapadas bajo los escombros.

“Quienes han escapado de la muerte y las lesiones ahora corren el riesgo de perder la vida debido a la falta de alimentos, agua potable, medicinas y atención médica”, recalcó.

Msuya describió cómo decenas de mujeres dan a luz en condiciones horribles, a menudo sin anestesia ni asistencia médica, mientras las bombas explotan a su alrededor.

“Las madres ven morir a sus bebés en sus brazos porque no tienen suficiente leche para mantenerlos con vida. Y los niños están muriendo porque no tienen suficiente comida ni agua”, abundó en declaraciones en Kuwait.

Todavía se puede hacer mucho

La subsecretaria sostuvo que todavía se puede hacer mucho por la gente en Gaza “si se dan las condiciones adecuadas”, que incluyen un cese de hostilidades y financiamiento continuo.

Msuya detalló que el personal de socorro ha sacado a la gente de los escombros y repatriado los cuerpos de los trabajadores humanitarios, incluidos los que trabajaban para las ONG World Central Kitchen y Médicos Sin Fronteras, que murieron ayudando a la población necesitada.

Añadió que la ONU mantiene negociaciones diarias con las partes para conseguir acceso a Gaza.

Más demoliciones en Cisjordania

Mientras tanto, en Cisjordania se produjeron nuevas demoliciones de edificios palestinos en el campamento de Al’Arrub en la gobernación de Hebrón.

Según los últimos datos de la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), 435 estructuras han sido dañadas o destruidas en toda Cisjordania en lo que va de año, obligando el desplazamiento de 824 personas.