Sobrescribir enlaces de ayuda a la navegación
Guterres pide poner toda la presión posible sobre Israel para evitar la invasión de Rafah
"Es muy importante poner toda la presión posible para evitar lo que sería una tragedia absolutamente devastadora", aseguró el titular de la ONU, que también animó encarecidamente al Gobierno de Israel y a los dirigentes de Hamás a que lleguen ahora a un acuerdo para detener la guerra.
El Secretario General ha pedido poner “toda la presión posible” sobre Israel para evitar la invasión terrestre de Gaza “que mataría a miles de civiles más y obligaría a huir a cientos de miles”.
En declaraciones a la prensa, António Guterres animó “encarecidamente” al Gobierno de Israel y a los dirigentes de Hamás a llegar a un acuerdo para un alto el fuego “por el bien de la población de Gaza, por el bien de los rehenes y sus familias en Israel, y por el bien de la región y del mundo en general”.
El Secretario General pidió a todos los que tienen influencia sobre Israel para que hagan todo lo que esté en su mano para impedir la invasión de Rafah.
"Es muy importante poner toda la presión posible para evitar lo que sería una tragedia absolutamente devastadora", contestó cuando le preguntaron qué nivel de influencia puede tener Estados Unidos.
El titular de la ONU también hizo un llamado para acabar con la actual guerra: “Por el bien de la población de Gaza, por el bien de los rehenes y sus familias en Israel y por el bien de la región y del mundo en general, animo encarecidamente al Gobierno de Israel y a los dirigentes de Hamás a que lleguen ahora a un acuerdo”, declaró a los periodistas en Nueva York.
Guterres expresó su temor de que, sin un acuerdo, “la guerra, con todas sus consecuencias tanto en Gaza como en toda la región, empeore exponencialmente”.
Investigar las fosas comunes
El Secretario General pidió además una investigación internacional independiente sobre el hallazgo de centenares de cadáveres enterrados en fosas comunes de hospitales atacados y asediados por Israel.
Para Guterres es imperativo que se permita el acceso inmediato de investigadores forenses internacionales independientes a estos lugares para determinar las circunstancias precisas en las que cientos de palestinos perdieron la vida y fueron enterrados o enterrados de nuevo.
“Las familias de los muertos y desaparecidos tienen derecho a saber lo que ocurrió, y el mundo tiene derecho a que se rindan cuentas por cualquier violación del derecho internacional que pueda haberse producido”, afirmó.
Elogios para la agencia para los refugiados
El Secretario General finalizó su intervención llamando la atención sobre la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA) y su “insustituible e indispensable labor” de apoyo a millones de palestinos en Gaza, Cisjordania, Jordania, Siria y Líbano.
“La presencia de UNRWA en toda la región es una fuente de esperanza y estabilidad. Su educación, asistencia sanitaria y otros servicios proporcionan una sensación de normalidad, seguridad y estabilidad a comunidades desesperadas", afirmó Guterres.
La Agencia, por su parte, solicitó recientemente 1200 millones de dólares para hacer frente a la crisis humanitaria de Gaza y responder a las necesidades de Cisjordania, donde la violencia va en aumento.
La UNRWA depende en gran medida de los donantes y unos 16 países interrumpieron sus contribuciones a principios de este año tras las acusaciones israelíes de que 12 miembros de su personal estaban implicados en los ataques del 7 de octubre, sin que hasta el momento haya aportado pruebas a esas acusaciones. La ONU nombró un organismo independiente para revisar los esfuerzos de la agencia por garantizar el principio humanitario de neutralidad.
El grupo, dirigido por la exministra francesa de Asuntos Exteriores Catherine Colonna, publicó recientemente su informe, según el cual “el conjunto de normas y los mecanismos y procedimientos vigentes (en UNRWA) son los más elaborados del sistema de las Naciones Unidas”.
Guterres afirmó que se está poniendo en marcha un plan de acción para aplicar las recomendaciones del informe, e hizo un llamamiento a la cooperación de los donantes, los países anfitriones y el personal de UNRWA.