Sobrescribir enlaces de ayuda a la navegación
Israel-Palestina: El posible uso del hambre como estrategia puede constituir un crimen de guerra
El responsable de velar por los derechos humanos en el mundo asegura que el bloqueo israelí de Gaza, que dura ya 16 años, ha tenido graves consecuencias para la población y devastado la economía local. Como prueba, las agencias humanitarias dijeron que cada vez más niños están al borde de la muerte por inanición y que la hambruna puede ser ya una realidad en el norte de la Franja.
Tras recordar que esta posible catástrofe fue anunciada por la ONU hace meses, Volker Türk explicó que el bloqueo de Gaza por parte de Israel, que dura ya 16 años, ha tenido graves consecuencias para los derechos humanos de la población civil, ha devastado la economía local y ha creado una dependencia de la ayuda.
“El alcance de las continuas restricciones de Israel a la entrada de ayuda en Gaza, junto con la forma en que sigue dirigiendo las hostilidades, puede equivaler al uso de la inanición como método de guerra, lo que constituye un crimen de guerra”, aseguró Türk.
Recién nacidos a punto de morir
Coincidiendo con sus comentarios, los trabajadores humanitarios de la ONU dijeron también este martes que aumenta el número de recién nacidos y niños al borde de la muerte debido al hambre, causada por cinco meses de intensos bombardeos israelíes y constantes denegaciones de acceso a la ayuda.
"Cada vez más, vemos niños que están al borde de la muerte que necesitan realimentación", declaró el portavoz de la Organización Mundial de la Salud a los periodistas en Ginebra, un día después de que expertos mundiales en nutrición advirtieran de que la hambruna podría producirse "en cualquier momento" entre ahora y mayo en el norte de la Franja de Gaza, una extensión de terrenos como dos veces la isla de Manhattan.
De hecho, el portavoz de OCHA aclaró que no se trata de proyecciones en las que se diga que probablemente ocurrirá a finales de mayo, sino que lo más probable es que ocurra en un periodo que empezó hace dos días, a mediados de marzo".
“Así que, lo que están diciendo, claramente, es que el umbral de la hambruna puede estar dándose ya en el norte de Gaza", afirmó.
¿A dónde ha ido a parar la humanidad?
Mientras los lactantes y los niños pequeños se encuentran entre los que menos pueden hacer frente al hambre crónica, la agencia sanitaria de la ONU afirmó que los equipos médicos del enclave asolado por la guerra han estado admitiendo a un número cada vez mayor de mujeres embarazadas con un peso peligrosamente bajo.
Las complicaciones que padecen se producen "cuando estás intentando llevar un embarazo y te falta la nutrición", dijo la doctora Margaret Harris, que insistió en que el peligro de hambruna en Gaza es puramente consecuencia de la actual crisis, desencadenada por los ataques de Hamás el 7 de octubre, en el conflicto palestino israelí, que comenzó en 1948.
"Todo lo que estamos viendo desde el punto de vista médico está totalmente provocado por el hombre; se trataba de un territorio en el que el sistema sanitario funcionaba bien", afirmó Harris, añadiendo que la desnutrición era "inexistente". "Era una población que podía alimentarse por sí misma", insistió.
A preguntas de los periodistas ante todo ese panorama, Laerke comentó: “Mis colegas y yo rara vez hemos visto una situación como la que hoy nos ocupa, tan rápida, tan brutal, y en la que uno se pregunta: ¿adónde ha ido a parar la humanidad?”
Plan para crear centros de alimentación
Para ayudar a los gazatíes más vulnerables y salvar vidas, la OMS se ha propuesto crear centros de estabilización de la malnutrición de emergencia. Pero los avances se han visto dificultados por la falta de seguridad y los continuos obstáculos al acceso de la ayuda, mantuvo la doctora Harris.
"Hemos establecido uno en el sur, estamos estudiando la posibilidad de hacerlo en el norte (...) pero el problema es que tenemos que ser capaces de traer los materiales, pero no podemos traerlos a la escala y a la gente sin el acceso y la seguridad. Así que no hay respuesta hasta que haya un alto el fuego".
"La desesperación es tan grande…", continuó Harris, antes de insistir en que la ayuda debe entrar en Gaza a "gran, gran escala".
Cuando eso ocurra, los suministros de ayuda "serán absorbidos como arena", afirmó.
Mientras, el alto Comisionado para los Derechos Humanos recordó que Israel, como potencia ocupante, tiene la obligación de garantizar el suministro de alimentos y atención médica a la población en consonancia con sus necesidades y de facilitar la labor de las organizaciones humanitarias para que presten esa ayuda.
“Israel debe garantizar que la población pueda acceder a esta ayuda de forma segura y digna. La legislación internacional sobre derechos humanos impone una obligación similar”, afirmó Türk.
Grandes pérdidas de empleo
Un nuevo informe de la Organización Internacional del Trabajo subraya las nefastas consecuencias de la guerra en Gaza y más allá, e indica que ha provocado la pérdida de 507.000 puestos de trabajo en los Territorios Palestinos Ocupados, que comprenden Gaza y Cisjordania.
Esto ya ha tenido un "impacto devastador" en la economía regional, afirmó la portavoz de la agencia, Zeina Awad, quien añadió que, de continuar el conflicto, se espera que la tasa de desempleo en el territorio alcance el 57%.
Los nuevos datos -procedentes de la OIT y de la Oficina Central Palestina de Estadística (PCBS)- estiman que a 31 de enero se habían perdido unos 201.000 puestos de trabajo en la Franja de Gaza, lo que representa alrededor de dos tercios del empleo total en el enclave.
Además, 306.000 puestos de trabajo, o más de un tercio del empleo total, también se perdieron en Cisjordania, donde las condiciones económicas se han visto gravemente afectadas.
Resultados de la investigación de la UNRWA
El martes, el jefe de la ONU tenía previsto escuchar las conclusiones provisionales de una de las dos investigaciones sobre UNRWA, tras las graves acusaciones de que parte de su personal había colaborado con Hamás durante los ataques terroristas del 7 de octubre contra Israel.
De los 12 empleados de la UNRWA implicados en las acusaciones, la agencia de la ONU identificó y rescindió inmediatamente los contratos de 10; mientras se confirmó la muerte de otros dos.
"Cualquier empleado de la ONU implicado en actos de terror será responsabilizado, incluso a través de acciones penales", dijo UNWRWA en un comunicado en su página web.
Guterres tenía previsto reunirse con Catherine Colonna, ex ministra de Asuntos Exteriores de Francia, que dirige el Grupo de Revisión Independiente. Estaba previsto que su trabajo comenzara el 14 de febrero con la ayuda de tres organizaciones de investigación: el Instituto Raoul Wallenberg de Suecia, el Instituto Chr. Michelsen de Noruega y el Instituto Danés de Derechos Humanos.
Se espera que el informe final, que se hará público, esté terminado a finales de abril.
La Oficina de Servicios de Supervisión Interna (OSSI) de la ONU también está llevando a cabo otra investigación. La OSSI lleva a cabo investigaciones administrativas sobre denuncias de conducta indebida en el lugar de trabajo. Esto incluye presuntas infracciones de los reglamentos, normas y códigos de conducta del personal de la ONU. Las conclusiones de esta investigación también se presentarán en un informe al Secretario General de la ONU.