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México: El Alto Comisionado llama a las autoridades a cumplir la sentencia de la Suprema Corte sobre la Guardia Nacional
El máximo tribunal mexicano invalidó el traspaso de ese cuerpo de seguridad al Ejército. Volker Türk recuerda que las fuerzas armadas sólo pueden asumir tareas de seguridad en circunstancias excepcionales y deben hacerlo temporalmente siempre subordinadas a las autoridades civiles.
El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Türk, instó este jueves a las autoridades de México a acatar de manera expedita la sentencia de la Suprema Corte de Justicia que anula la transferencia de la Guardia Nacional al control militar.
El Congreso aprobó en septiembre pasado una reforma legislativa que permitió el traspaso de la Guardia Nacional al control del Ejército.
El martes de esta semana, la Suprema Corte declaró inconstitucional dicho traspaso del cuerpo de seguridad a las fuerzas armadas, y subrayó la importancia de respetar la independencia y la separación de poderes, así como la existencia de contrapesos institucionales.
En un comunicado, Volker Türk afirmó que es fundamental garantizar el carácter civil de la Guardia Nacional, “en consonancia con la Constitución mexicana y los estándares internacionales de derechos humanos”.
Mejorar las capacidades civiles
Agregó que espera que la decisión de la Corte dé lugar a un diálogo amplio que contribuya a mejorar las capacidades de las fuerzas de seguridad civiles y resulte en la limitación del papel de las fuerzas armadas en tareas de seguridad pública.
El Alto Comisionado destacó que desde 2006, México ha ido militarizando sus fuerzas de seguridad, provocando un aumento en las denuncias de violaciones de derechos humanos por parte de los soldados.
Recordó que tanto la dependencia a su cargo como otros organismos internacionales de derechos humanos han pedido reiteradamente a México devolver la seguridad pública a las instituciones civiles.
Subordinación a las autoridades civiles
“Las fuerzas armadas sólo deben ser desplegadas en tareas de seguridad temporalmente, en circunstancias excepcionales, subordinadas a las autoridades civiles y siempre bajo la supervisión efectiva de órganos civiles independientes”, recalcó el Alto Comisionado.
En 2019, el Gobierno de México eliminó la Policía Federal y creó la Guardia Nacional bajo el mando de la Secretaría de Seguridad Pública y Ciudadana, que rigió sus operaciones hasta el traspaso del control a la Secretaría de la Defensa Nacional tras la aprobación de la reforma de septiembre de 2022.