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ONU Derechos Humanos insta a adoptar un enfoque coordinado para salvar a los rohinyá varados en alta mar
En lo que va del año, más de 2400 rohinyás intentaron abandonar Bangladesh y Myanmar. El máximo responsable en materia de derechos humanos de la ONU también solicitó apoyo para Bangladesh donde habita más de un millón de refugiados rohinyás desde 2017.En lo que va del año, más 2400 rohinyás intentaron abandonar Bangladesh y Myanmar. El máximo responsable en materia de derechos humanos de la ONU también solicitó apoyo para Bangladesh donde habita más de un millón de refugiados rohinyás desde 2017.
El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, llamó este viernes a adoptar un enfoque regional coordinado que sirva para proteger las vidas de los miles de refugiados rohinyá que arriesgan sus vidas emprendiendo peligrosos viajes por mar.
Türk cifró en más de 2400 el número de rohinyás que durante este año intentaron salir de Bangladesh y Myanmar y en más de 200 el de fallecidos.
“Según informes recientes, se ha dejado a la deriva durante días y días a embarcaciones abarrotadas e inseguras que transportaban a rohinyás sin ningún tipo de ayuda", dijo.
El Alto Comisionado instó a los países de la región a iniciar “un mecanismo de coordinación que garantice la búsqueda y el rescate proactivos, el desembarco de los refugiados rohinyás en sus territorios y su protección efectiva", y añadió, que algunos Estados ya han prestado asistencia.
La petición de Türk se produce tras la llegada esta semana de un barco con más de 180 refugiados rohinyá a Indonesia, según informan fuentes de prensa. Las autoridades indonesias permitieron el desembarco de algunos de los pasajeros en la provincia de Aceh. La embarcación llevaba semanas a la deriva y sin electricidad.
Apoyo también para Bangladesh
El Alto Comisionado pidió apoyo, tanto a nivel regional como mundial, para Bangladesh, donde habita más de un millón de refugiados rohinyás desde el año 2017.
El pasado mes de agosto, cuando se cumplió el quinto aniversario del masivo desplazamiento forzoso de rohinyás y personas de otras comunidades del estado de Rakhine, en Myanmar, hacia Bangladesh, el Secretario General de la ONU emplazó a la comunidad internacional a seguir buscando soluciones globales, duraderas e inclusivas a la crisis.
En un comunicado emitido por la Oficina del Portavoz de António Guterres se recordaba el deterioro de la situación humanitaria, de derechos humanos y de seguridad en Myanmar, tras el golpe de Estados en febrero de 2021.
“Es evidente que debe encontrarse una solución urgente que permita el retorno voluntario de todos los rohinyá, respetando plenamente su dignidad y sus derechos humanos como ciudadanos de Myanmar de pleno derecho e iguales”, enfatizó el Alto Comisionado.